El Madoff venezolano

El Madoff venezolano

El Universal

Hace poco más de un mes, Madoff era dueño de una firma de trading y un hedge fund que se contaba entre los más exitosos de Estados Unidos. Hizo una larga carrera en Wall Street, llegando a ser Presidente del NASDAQ, una de esas figuras a las que siempre se recurría en busca de opinión y consejo. Sus clientes incluían, entre otros ricos y famosos, a Steven Spielberg y Banco Santander; el tipo de referencias que a su vez atraen aún más clientes. Madoff era considerado una especie de Midas, un George Soros, que produjo a sus inversionistas retornos consistentes de dos dígitos aún en los peores tiempos.

Todos se preguntaban cómo era posible, muchos trataron de acercarse a él, fue visitado por los contadores de sus principales clientes e inclusive investigado dos veces por la Comisión de Valores de los Estados Unidos. Siempre salió adelante. Madoff era inaccesible. Mantenía bien sus secretos. Tras ser detenido en diciembre pasado por fraude, ha reconocido que “todo fue una gran mentira”. Su fondo de inversiones era sólo una pirámide, los retornos prometidos eran pagados con el dinero aportado por nuevas y sucesivas rondas de inversionistas. Hasta que esa base llegó a ser tal que no fue posible reunir una nueva cohorte tan grande como para financiar los retornos de la anterior.

Nuestro propio Madoff asegura que aún con el petróleo a cero aquí no habrá crisis. No importa que las importaciones representen 37% de la demanda interna, su punto más alto en los últimos 25 años. Tampoco que el petróleo represente 95% de nuestras exportaciones, otro tope histórico. Para eso tenemos un enorme fondo que hemos ido acumulando durante todo este tiempo, nadie sabe muy bien cómo, con el que podremos hacerle frente a la caída en los precios y salir incólumes.

Uno se sienta a sacar cuentas con los volúmenes reportados por las fuentes internacionales y los precios de la cesta venezolana, y descubre una sobre-estimación de nuestras exportaciones petroleras de más de veinte mil millones de dólares sólo en 2008. Siendo así, tomando en cuenta que estamos en niveles de récord de importaciones y salida de capitales, ¿cómo fue posible la acumulación de 40.000 mil millones de dólares? Además, en el supuesto negado, ¿en estos años no se ha pagado nada de ahí? ¿Están íntegros? Al igual que en el caso de Madoff, hay muchos analistas que, sin saber explicar muy bien esa enorme diferencia, insisten en que efectivamente esas son las magnitudes de las que dispone. Para ellos, Venezuela está produciendo lo que dice la OPEP y no lo que dice PDVSA, pero esos fondos de alguna manera se han ido acumulando allí. Es casi mágico, como Madoff. Por eso este año no habrá crisis, aunque el petróleo promedie 45 dólares por barril, 50% menos que el año pasado. Es decir, la premura por hacer el referéndum en febrero no tiene un trasfondo económico, es sólo un capricho político. A la hora de las chiquitas, nuestro Madoff ordenará que nuestra ilusión de bienestar sea fondeada desde ese bolsillo. Algo así como Hitler ordenando movimientos de divisiones y tanquecitos de plástico en el mapita, a días de la caída de Berlín. Sí, sí, mein Führer. Todos mirándose las caras. Toda una gran mentira.

Disponible en:
http://www.eluniversal.com/opinion/090116/el-madof…


Miguel Ángel Santos

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